Electronic Arts y DICE han anunciado el inicio de un nuevo test comunitario dentro de Battlefield Labs, esta vez enfocado en un modo de juego que hasta ahora la franquicia había evitado explorar de forma directa: el Battle Royale. La iniciativa arrancó el 10 de septiembre de 2025 y busca probar cómo encajan los pilares tradicionales de la saga en un género que sigue atrayendo a millones de jugadores en todo el mundo.
El equipo de desarrollo ha compartido un documento detallado con las bases de esta propuesta, subrayando que se trata de un experimento abierto al feedback de la comunidad, cuyo resultado podría definir el futuro de Battlefield en el mercado competitivo de los shooters.
Un Battle Royale con identidad Battlefield
La filosofía detrás del proyecto es trasladar los elementos característicos de la saga al formato Battle Royale. Esto incluye el sistema de clases, la importancia del juego en escuadra, la destrucción táctica de escenarios y, sobre todo, la presencia de vehículos de distinto tipo.
Cada partida contará con 100 jugadores organizados en 25 escuadras de cuatro, lo que refuerza la dimensión cooperativa. A diferencia de otros títulos del género, el círculo de reducción no permitirá ningún tipo de interacción: no se podrá utilizar como cobertura ni atravesarlo temporalmente. El contacto con él supondrá la eliminación inmediata del jugador, una mecánica diseñada para intensificar la tensión y forzar enfrentamientos.
Mapas, vehículos y destrucción
El nuevo mapa desarrollado para este test ha sido diseñado específicamente con el Battle Royale en mente. Incluye puntos de interés diferenciados, con estilos visuales y estructuras únicas que favorecen estrategias distintas.
Los jugadores tendrán acceso a medios de transporte comunes, así como a vehículos blindados de mayor poder ofensivo. La intención, según DICE, es crear un entorno de “armas combinadas” en el que el movimiento rápido y el uso táctico de la destrucción sean determinantes. Los escenarios permitirán derribar muros, abrir nuevas rutas y, en casos extremos, colapsar edificios enteros para obtener ventaja.
Clases, progresión y rasgos
La elección de clase será un elemento central. Una vez seleccionada al inicio de la partida, no podrá modificarse durante el transcurso de la misma. Cada jugador comenzará con dos gadgets predeterminados, y a medida que progrese obtendrá experiencia mediante eliminaciones, misiones secundarias o la recogida de Intel Cases, que benefician a toda la escuadra.
Con esta progresión se desbloquean rasgos específicos por clase. Por ejemplo, la clase Asalto puede equipar placas de armadura con mayor rapidez, lo que supone una ventaja significativa en combates intensos. El sistema busca que la composición del equipo influya directamente en la forma en que se desarrolla cada enfrentamiento.
El papel del loot y las misiones
El sistema de botín se divide en cinco niveles de rareza. Entre los objetos disponibles figuran armas con accesorios, explosivos, gadgets como lanzacohetes, kits de mejora, armaduras y Strike Packages (habilidades de gran impacto, como ataques aéreos).
Además, se integran misiones dinámicas que ofrecen recompensas de alto valor. Estas tareas pueden consistir en desbloquear depósitos de armas, obtener llaves de vehículos o plantar explosivos en objetivos concretos. Al completarlas, las recompensas se envían mediante airdrop, generando nuevos puntos de conflicto en el mapa.
Un laboratorio abierto al feedback
Desde DICE insisten en que este modo es, por el momento, un experimento. La fase de pruebas en Battlefield Labs permitirá observar cómo los jugadores utilizan las clases, qué impacto tienen los rasgos en las partidas y hasta qué punto las mecánicas de destrucción y misiones enriquecen el flujo de juego.
La compañía señala que toda la retroalimentación recibida será clave para decidir si este Battle Royale se integra de manera definitiva en la saga o queda como un experimento aislado. Los interesados pueden inscribirse y seguir las novedades a través de la web oficial de Battlefield y el servidor de Discord habilitado para la comunidad.
Perspectivas de futuro
La llegada de Battlefield al terreno del Battle Royale plantea varias incógnitas. Por un lado, la propuesta de integrar vehículos y destrucción masiva puede diferenciarlo de competidores consolidados como Warzone o Apex Legends. Por otro, la comunidad observa con cautela, recordando que la saga ha atravesado etapas de altibajos en sus últimos lanzamientos.
Si este experimento consigue captar la atención y demostrar que el ADN de Battlefield tiene cabida en este formato, podría suponer un punto de inflexión para la franquicia. En caso contrario, quedará como una curiosidad más en la larga historia de intentos por reinventar la serie.