NVIDIA está a punto de dar un giro importante en el mundo de los portátiles gaming con el anuncio de sus primeros SoC híbridos, llamados N1 y N1X. Se trata de nuevas soluciones que integran tanto la CPU como la GPU en un solo chip, en línea con lo que ya están haciendo AMD e Intel. La presentación oficial está prevista para el CES 2026. Esta integración supone un paso adelante para lograr dispositivos más eficientes y potentes, especialmente en un sector que busca mejorar la experiencia de juego sin sacrificar movilidad.
Principales especificaciones técnicas del N1X
El modelo N1X viene equipado con una CPU de 20 núcleos basada en Armv8, que combina 10 núcleos Cortex-X925 para tareas que requieren mucha potencia y otros 10 Cortex-A725 para trabajos más ligeros. Lo más llamativo de este SoC es la GPU integrada, que cuenta con 6.144 núcleos CUDA basados en la arquitectura Blackwell y ofrece 48 unidades de cómputo (SMs). Según las filtraciones, esta GPU tendría un rendimiento similar al de una GeForce RTX 5070 de sobremesa.
En pruebas preliminares publicadas en Geekbench, el N1X ha alcanzado 46.361 puntos en OpenCL, un resultado comparable al de una RTX 2050 Laptop. No obstante, se espera que el rendimiento mejore en las versiones definitivas del chip. Por ahora, la GPU del N1X funciona a una frecuencia de 1,05 GHz, bastante por debajo de los 2 GHz habituales en modelos de escritorio, así que es probable que las especificaciones finales sean aún más avanzadas.
Gestión de memoria y sistema operativo
El N1X utiliza un sistema de memoria compartida, sin VRAM dedicada, lo que permite asignar hasta 64 GB de la GPU dentro de un máximo de 128 GB de RAM para todo el sistema. Este diseño es compatible con Windows 11 ARM (AArch64), lo que abre posibilidades interesantes para portátiles ligeros pero potentes. Se cree que esta forma de trabajar con la memoria ayudará a mejorar tanto la eficiencia energética como el rendimiento general.
El panorama de los portátiles ARM
La llegada de los SoC N1 y N1X marca el primer movimiento serio de NVIDIA para entrar en el competitivo segmento de los ordenadores portátiles ARM con chip híbrido. Con esta estrategia, la marca quiere plantar cara a las soluciones de AMD e Intel, además de acercarse al modelo de integración tan popular con los Apple Silicon. El interés por dispositivos que ofrezcan ligereza y eficiencia, pero también un buen rendimiento gráfico, está creciendo. Por eso, el lanzamiento de estos SoC es una novedad importante tanto para los usuarios como para los fabricantes.
Con más detalles filtrándose, la expectación no deja de aumentar. Si el N1X logra ofrecer buenas prestaciones tanto en portátiles gaming como en equipos profesionales ultraligeros, puede suponer un antes y un después en este tipo de productos.
Precaución ante la información filtrada
A pesar de la emoción, conviene no olvidar que parte de esta información aún no está confirmada. Aspectos clave como las frecuencias definitivas o el consumo energético podrían variar antes de la presentación. Tampoco está claro si los N1 y N1X seguirán una línea de desarrollo parecida a la del NVIDIA GB10 (más orientado a inteligencia artificial), ni si contarán con variantes con VRAM dedicada o cuál será su precio de lanzamiento.
Tanto usuarios como profesionales del sector seguirán de cerca los próximos pasos de NVIDIA, sobre todo teniendo en cuenta la intensa competencia actual en el mercado de GPU para portátiles. Como se recoge en un análisis reciente: «Uno de los grandes titulares de esta filtración es la presencia de 6.144 núcleos CUDA en la GPU integrada del N1X, lo que ha generado gran expectación» — HardwareOnline.com.
En definitiva, la llegada de los N1 y N1X podría suponer un avance importante para los portátiles a la hora de ejecutar juegos y aplicaciones gráficas exigentes. Esto seguramente impulsará la innovación en el sector y aumentará las opciones disponibles para los usuarios.
